Europa se debilita más con la salida de Rajoy del gobierno español

Madrid

El mandato de seis años de Mariano Rajoy como jefe de gobierno de España llegó prácticamente a su fin ayer, luego de que el opositor Partido Socialista (PSOE) se asegurara suficiente apoyo para forzar su salida a través de una moción de censura.

En un debate parlamentario, varios partidos de oposición más pequeños dijeron que apoyan la moción de los socialistas para destituir a Rajoy, que se somete a votación hoy. Salvo sorpresas de último minuto, ello le da al líder socialista Pedro Sánchez suficientes sufragios para ganar una estrecha mayoría en el parlamento de 350 escaños.

Partidarios de Rajoy dentro de su Partido Popular (PP) insistieron en que el mandatario no renunciará a su cargo, sin embargo hasta ayer había posibilidad de que cambiara de opinión antes de la votación. “Estoy devastado (...) no puedo creer que esto vaya a terminar así, después de todo lo vivido”, dijo un legislador del PP, recordando que Rajoy había sido jefe de Estado durante la crisis de deuda de la eurozona, de una severa recesión y del rescate del sistema bancario de España.

Más incertidumbre

Una renuncia de Rajoy activaría el inicio de un gobierno provisional, por un período potencialmente largo, antes de que un nuevo gobierno pueda establecerse. Además se sumaría a la sensación de que la política europea está a la deriva, luego de que Italia pasara más de tres meses sin formar gobierno.

Sánchez pasa a ser automáticamente jefe del gobierno si Rajoy pierde la votación. Pero ello, además, podría llevar a España a un punto muerto en lo político, dado que el PSOE controla menos de una cuarta parte de los escaños en el parlamento y podría ser incapaz de aprobar leyes importantes.

En un discurso ayer en el parlamento, Rajoy acusó al líder socialista de intentar forzar su camino hacia el poder luego de que su organización perdiera dos elecciones bajo su liderazgo. “Todos saben que Pedro Sánchez nunca va a ganar las elecciones y esta es la razón de la moción, de su urgencia”, dijo.

Sánchez logró reunir 180 votos con el apoyo del Partido Nacionalista Vasco, y con el respaldo del grupo político de extrema izquierda Podemos y de dos partidos nacionalistas catalanes. Aitor Esteban, legislador del partido vasco, dijo que apoya la moción por un sentido de “ética y responsabilidad”. Pero advirtió a Sánchez: “Su gobierno será muy complicado, débil y difícil”.

En tanto, Sánchez dijo que una vez en el poder, mantendrá el presupuesto de Rajoy para 2018 y “reestablecerá el diálogo” entre Madrid y el nuevo gobierno pro-independentista de Cataluña. La disputa sobre la autonomía catalana marcó los últimos meses de la administración de Rajoy.

La turbulencia política se desató la semana pasada tras la decisión contra el PP de Rajoy en un juicio por corrupción de larga data, conocido como el caso Gürtel. Una corte española encontró culpables a exfuncionarios de la organización de operar un fondo para sobornos.

Rajoy no fue acusado de irregularidades, pero la corte dijo que su testimonio y el de otras figuras importantes, que afirmaron que no sabían nada, “no eran creíbles”.

Luz verde para gobierno populista en Italia

Por James Politi
Roma
En Italia, el Movimiento anti-establishment Cinco Estrellas y la Liga de extrema derecha obtuvieron ayer la aprobación del presidente, Sergio Mattarella, para dar inicio a un gobierno populista, poniendo fin a la crisis política que se apoderó del país y atemorizó a los inversionistas.
En una reunión en el Palacio del Quirinal, Giuseppe Conte, designado primer ministro por la alianza, presentó a Mattarella la lista de ministros, que incluyen una mezcla de académicos y políticos tecnocráticos de ambos partidos en posiciones clave. Las designaciones fueron aceptadas por el mandatario y se espera que la nueva administración jure hoy a las 16.00 horas local.
Giovanni Tria, un profesor de economía política de la Universidad Vergata en Roma, será ministro de Finanzas, mientras que Paolo Savono, quien fue controversialmente bloqueado por Mattarella para el cargo el domingo, será ministro de Asuntos Europeos.
En tanto, Enzo Moavero Milanesi, exasistente del exprimer ministro Mario Monti, será el titular de la cartera de Relaciones Exteriores.
Luigi Di Maio, líder de Cinco Estrellas, será viceprimer ministro y ministro de Trabajo y Desarrollo Social, lo que incluye la política comercial. Y Matteo Salvini, jefe de la Liga de extrema derecha, será ministro del Interior, a cargo de la inmigración.
El último obstáculo para la entrada en vigencia del nuevo gobierno será el voto de confianza en el parlamento la próxima semana.
La esperanza de que ambos partidos superaran sus diferencias y evitaran el llamado a elecciones anticipadas llevó a los activos italianos a subir ayer por segundo día consecutivo.